Embajadora participa como oradora en el VIII Encuentro Triángulo Estratégico
El lunes 6 de mayo, la Embajadora María José Argaña participó como oradora en el VIII Encuentro Triangulo Estratégico América Latina – Europa – África organizado por el IPDAL – Instituto para el Desarrollo de América Latina, que se realizó durante dos días, con el apoyo de la Secretaría General Iberoamericana – SEGIB, en la sede del banco Caixa Geral de Depósitos.
Este encuentro reúne a destacados oradores nacionales e internacionales, además de contar con la participación de autoridades locales y extranjeras, que durante dos días presentan propuestas sobre temas tales como: migraciones, transferencia de conocimientos, igualdad de género y política externa de la Unión Europea, a fin de encontrar caminos para mejorar las relaciones atlánticas, teniendo a Portugal como hub de intercambio de ideas.
En ese sentido, la Embajadora María José Argaña fue invitada a participar como oradora en el panel sobre Igualdad de Género, donde expuso conjuntamente con María del Carmen Morales, investigadora IRELAC y Universidad Leuven (Bélgica), Paola Amadei, Directora Ejecutiva de la Fundación EU-LAC y João Caroço, Director Ejecutivo del Centro Norte-Sur del Consejo de Europa.
Durante su presentación, la Embajadora paraguaya y ex Ministra de la Mujer, hizo referencia al concepto de igualdad de género de las Naciones Unidas, en relación con el principio jurídico universal de la igualdad de derechos entre mujeres y hombres. Así también, de forma general expuso sobre la valoración de la mujer a lo largo de la historia en la sociedad, la familia, la religión, las ciencias y la cultura, desde una perspectiva histórica demuestra que el género femenino arrastra una desigualdad en cuanto a representación política o mercado laboral, entre otros aspectos.
Puntualmente recordó que la Guerra de la Triple Alianza (1865-1870), acabó con casi el 90% de la población masculina en el Paraguay, produciendo un cambio social donde la mujer asumió el papel de cabeza de hogar y tuvo la tarea de reconstruir la nación. Igualmente señaló que en nuestro país, amparada en la educación y en el emprendedurismo, la mujer paraguaya va abriéndose paso entre los estereotipos de nuestro pasado para asumir roles protagónicos en áreas donde anteriormente no se acostumbraba ver rostros femeninos, destacando que aunque hubo avances significativos, la equidad en el Paraguay aún es un desafío.
Asimismo, refirió que para que la igualdad sea real y efectiva, es necesario que sea valorada la capacidad y el trabajo de la mujer, que se propicie el acceso a empleos de calidad, a cargos de toma de decisión, distribuyendo equitativamente roles entre hombres y mujeres.
Señaló que debemos tener una mirada optimista y en ese sentido mencionó los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en particular el número 5, que tiene como fin alcanzar la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas, pues la única lucha que verdaderamente perdemos, es la lucha que no hacemos.